Genuine

El fútbol es uno de esos negocios que juegan con los sentimientos de las personas. En Málaga estamos más que acostumbrados a sufrir en lo deportivo y en lo institucional. Estamos ya más que hechos a ser unos perdedores, unos pobres desgraciados que a la mínima que asomamos la cabeza nosotros mismos nos la cortamos. Qué es eso de ser felices gracias al fútbol. En los despachos hemos sufrido más que nadie: decirle adiós a una Europa League, prohibición de fichar, amenazas y un dueño que no nos hace sufrir en los despachos porque nunca los ha pisado. Los malaguistas estamos hechos para pasarlo mal.

Pero no todo es mamoneo profesional, ni mucho menos. El Málaga Club de Fútbol tiene mucho más que una primera plantilla que malcobra y malvive. Tiene un Femenino que ha sufrido y sufre, pero compite. Y tiene otro equipo, vinculado a la Fundación, que es el que más alegrías da, el Genuine. Un equipo formado por personas con discapacidad que demuestra cada temporada que el fútbol no es sólo negocio, que hay mucho más. Un fútbol con valores, con integración, con buenas formas y con ambiente familiar. La Fundación del Málaga Club de Fútbol tiene en marcha este proyecto desde hace años y tiene una importante presencia en la estructura de la organización. Es importante esta apuesta porque son estos gestos los que hacen pensar, soñar e imaginar una sociedad mejor, en la que incluso un negocio estratosférico y, en ocasiones, inhumano, encuentre un nexo con la realidad.

El proyecto Genuine es importantísimo, por pequeño que sea. Como minúsculo fue el inicio de la aventura en el Levante Unión Deportiva con Vicente Herrero Gómez. Un directivo, responsable de marketing de un equipo de La Liga que pasó a ocuparse de una fundación a la que empezó a darle cada vez más sentido. Programas como “Di_Capacidad”, que han servido para visibilizar a personas con diversidad cognitiva. Bienvenidas sean estas iniciativas que humanizan el fútbol, el negocio de los sentimientos.