De Tokio a Torremolinos por su sueño de ser torero
Publicado en El Mundo
La plaza de Torremolinos vivió este domingo una de esas tardes de toros que se recordarán más por la anécdota que por el propio festejo. A las siete de la tarde, el novillero japonés Taira Nono hizo su debut con picadores en un mano a mano junto a Pablo Belando con novillos de Gerardo Ortega.
Un novillero tokiota no es algo habitual. Por eso lo que en estos días se buscan chascarrillos con los que adornar el debut de un torero que lleva luchando por llegar a lo más alto desde hace 12 años.
Llegó a España para convertirse en matador de toros después de ver un documental sobre tauromaquia en la televisión nipona. Fue deportado por no tener los papeles en regla, pero insistió y volvió a Huelva, donde actualmente se gana la vida trabajando en campañas agrícolas. Hoy, con 36 años ve un poco más cerca su sueño tras su debut con los del castoreño.
En Huelva, Taira es un personaje reconocido hasta el punto que el 29 de septiembre de 2007, el día de su boda, el alcalde de la ciudad, Pedro Rodríguez, y el embajador japonés en España, Motohide Yoshikama, no quisieron perderse tan peculiar acto. El torero iba vestido con el atuendo típico nipón pero, como todo en la vida de Taira Nono, tuvo un toque especial. Tras la ceremonia pasearon en una calesa por las calles de Huelva, hasta llegar a la plaza de toros de La Merced. Allí, el diestro no dudó en deleitar a los invitados con algunos pases a un novillo.
El torero busca ascender por todos los medios a lo más alto del escalafón. Su figura mediática se vio ampliada el verano pasado con su aparición en el programa ‘Salvados’ que presenta Jordi Ebolé, ‘El Follonero’, en una edición dedicada especialmente al mundo de los toros.
La concentración, los nervios y la responsabilidad que conllevan una cita tan importante como a la que se enfrentaba este domingo Taira lo ha tenido perdido del mapa en los días previos. No se podía contactar con él porque no quería que nada ni nadie perturbe su preparación.
El gerente de la empresa que administra el coso torremolinense, Jorge Conde, aseguró que fue el torero nipón quien se ofreció a debutar en esta plaza. «Al principio nos llamó mucho la atención. En cuanto hablamos con él, me fui a buscar vídeos a internet, y ahí me di cuenta de que no era muy extranjero en esto del toreo».
Como es obvio la empresa aceptó la novillada, e incluyó en el cartel al novillero murciano Pablo Belando, al que apoderan. El formato de la corrida fue el de un mano a mano al estilo de los que se realizan en la costa, con sólo cuatro novillos. «Es un espectáculo muy dirigido a los extranjeros. Además, con el aliciente especial de Taira, hemos recibido reservas de grupos de japoneses», añadió Conde. La novedad del novillero japonés afincado en Huelva supuso un aumento en la afluencia de espectadores en la plaza.
Más allá de la curiosidad, Taira Nono convenció a Conde porque «no es un novato en esto. Lleva muchas novilladas sin picadores y es un debut merecido». En su estreno estuvo acompañado por medios de comunicación nacionales. Ninguna televisión quiso perderse el momento. Como ocurriera en 1995 con el fenómeno mediático de El niño del Sol naciente, Taira Nono tuvo la presión añadida de tener miles de ojos puestos en su actuación.
En la tarde de este domingo, el novillero cortó una oreja en el primero y paseó orgulloso el trofeo que, curiosamente, no lanzó a las gradas. Sin duda ese apéndice tendrá un lugar privilegiado en la galería de recuerdos de Taira Nono. En el segundo saludó desde el tercio. Después de su presentación con picadores, a este japonés le queda un último paso para cumplir su sueño: tomar la alternativa y ser matador de toros.